La mayoría de los adultos atraviesan la crisis de mediana edad que no es más que una fase de transición personal que según la persona se puede vivir con mayor o menor intensidad.
En la vida vamos atravesando diferentes etapas y a medida que las vamos viviendo comprendemos aquellas que dejamos atrás.
Al ir madurando, vamos dándole un sentido y analizamos lo positivo tienen las etapas que hemos atravesado y cuestionándonos como serán aquellas etapas que aún nos quedan por vivir.
Esta crisis puede verse influida por múltiples factores como haber vivido ya los principales años de juventud, notar los primeros síntomas de envejecimiento físico, que en muchas ocasiones puede coincidir con la salida de los hijos del hogar o con el fallecimiento de los padres.
La persona durante esta crisis de mediana edad realiza una autoevaluación de lo que ha vivido hasta el momento y el resultado puede repercutir en mejoras a nivel personal, profesional o de pareja.
El envejecimiento está ligado tanto a factores genéticos como cambios en el propio organismo sobre los que sí podemos actuar a través de hábitos de vida saludable que frenan el deterioro físico y psíquico.
Es importante que desaparezcan las críticas, cuestionamientos y mitos que existen acerca de la sexualidad de los mayores en nuestra sociedad. Todos los seres humanos, sin excepción, tienen derecho a vivir su sexualidad con compromiso, intimidad, pasión y satisfacción.
En esta etapa suele disminuir la frecuencia de las relaciones, debido a los cambios físicos y emocionales que cada miembro de la pareja experimenta. Es importante adaptar la relación, las posturas y el ritmo de la relación a las necesidades que vaya teniendo cada miembro de la pareja. Pero esto no significa que la sexualidad tenga que desaparecer, sino que es posible modificar los hábitos para que resulte aún más placentera. Cuidando estos detalles, es posible disfrutar de la sexualidad en la madurez y también en la tercera edad.
Este es un buen momento para proponerse nuevos objetivos, para reconstruir aquello con lo que hasta ahora no estábamos conformes. Siempre es posible aprender cosas nuevas, volver a empezar, conocer gente nueva, viajar, y experimentar.
